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Orégano: El Truco Infalible del Jardinero para Mantenerlo Próspero

Orégano: El Truco Infalible del Jardinero para Mantenerlo Próspero

El orégano (Origanum vulgare) es una de las hierbas más versátiles y apreciadas en la cocina y la medicina natural. Sin embargo, muchas personas encuentran que su planta de orégano crece bien al principio, pero luego pierde vigor o se vuelve leñosa. ¿Cómo evitarlo? Los jardineros expertos tienen un truco infalible para mantenerlo siempre verde, frondoso y aromático.

El Secreto: La Poda Estratégica

El truco definitivo para un orégano saludable y productivo es la poda regular y estratégica. Aunque es una planta resistente, sin un mantenimiento adecuado puede volverse leñosa, con menos hojas y un sabor menos intenso. A continuación, te explicamos cómo y cuándo podarlo correctamente.

¿Cuándo podar el orégano?

  • Primavera y verano: Durante la temporada de crecimiento, es recomendable podarlo cada 3-4 semanas para estimular la producción de hojas nuevas.
  • Después de la floración: Si tu planta ha florecido, realiza una poda profunda para rejuvenecerla y evitar que concentre toda su energía en las semillas.
  • Finales del verano o principios del otoño: Antes de que llegue el frío, una poda moderada ayuda a preparar la planta para el invierno.

¿Cómo hacer la poda correctamente?

  1. Corta los extremos de los tallos con unas tijeras de podar limpias, asegurándote de no cortar más de un tercio de la planta.
  2. Elimina tallos secos o leñosos para favorecer el crecimiento de nuevos brotes tiernos.
  3. Cosecha regularmente las hojas para estimular su producción y evitar que la planta envejezca demasiado rápido.
  4. Evita que florezca demasiado pronto, ya que la floración reduce la cantidad de hojas y su sabor.

Otros Consejos para un Orégano Próspero

  • Ubicación soleada: El orégano ama el sol. Plántalo en un lugar donde reciba al menos 6 horas de luz solar directa.
  • Riego moderado: Es una planta resistente a la sequía, así que evita el exceso de agua para prevenir hongos y raíces podridas.
  • Tierra bien drenada: Usa un sustrato ligero y aireado para evitar encharcamientos.
  • Abono ocasional: Un poco de compost o fertilizante orgánico una vez al mes en temporada de crecimiento es suficiente.

Conclusión

Si sigues este truco de poda estratégica y combinas buenos cuidados, tu planta de orégano se mantendrá vigorosa, con hojas frescas y un aroma intenso durante todo el año. ¡Ponlo en práctica y disfruta de un orégano siempre próspero en tu jardín o huerto! 🌿✨